C. Gallardo
Artista Visual
Pues bien, cuando este tipo de anomalía se produce, aparecen soluciones formales impensadas que se despliegan en tu pantalla, produciendo la mayoría de la veces nada mas que un gran disgusto.
A pesar de no ser la imagen que esperabas visualizar, en esta aventura de obtener lo impensado cada deformidad cuenta como un hallazgo y por tanto se debe estar atento para lanzar nuestras propias redes de captura, y así atrapar y preservar el fenómeno como un objeto único.
Lo deseado es siempre escaso, escurridizo, la mayor parte de las veces efímero.
El proceso de Las Artes Eléctricas sentarse en el muelle digital, esperando que alguna anomalía se presente para capturarla; es una pesca digital, que requiere de mucha paciencia, y rapidez para enviar estas preciosas alteraciones visuales a la carpeta de los tesoros.
Las Artes Eléctricas es de acuerdo a este pensamiento, la antítesis de la manipulación intencionada que definen al Glitch Art. Las Artes Eléctricas es mas bien el puro instinto del cazador detrás de su presa, que espera la oportunidad para disparar la cámara y hacer la fotografía, operando un corte en el acontecer electrónico que transcurre frente a sus ojos.
En la fotografía tradicional el fotógrafo dispara cuando su instinto y sus conocimientos se lo indican, pero en Las Artes Eléctricas, el "fotógrafo" no obtura sino que captura. En ambos casos aparece una necesidad de preservar esa quimera. De entenderla, de encontrar la belleza en su alteración.
Estamos en un nuevo estadio de comprensión de la imagen. Como en el expresionismo que encuentra su razón en la deformación del trazo o de la mancha, esta tendencia devela una sensibilidad frente a lo impensado. Nos obliga a repensar la belleza y reconocerla nuevamente en su desnudez.
